Como llevamos prácticamente 2 meses en el dique seco, sin salir de la “civilización” ni para cuidar los huertos de autoconsumo, voy a rememorar una batallita que sucedió ya hace unas cuantas lunas…
Allá por Agosto de 2015 cuando tras cruzar algún que otro whatsapp con Francesc, el Andorrano trotamundos, con el que compartimos buenos años estudiando en Barbastro y ser uno de los mejores amigos que he me he encontrado en la andadura de la vida, nos pusimos de acuerdo para pasar unos días en su país para conocerlo más allá de los tumulutosos puebos de fondo de valle de sobras conocidos por la mayoría de los que alguna vez hayamos visitado el país de los Pirineos y adentrarnos en la tranquilidad de sus montañas.
Así que, sin más, el 11 de Agosto, quedamos en la capital del Principado, y tras echar un bocado y hacernos con una licencia de pesca cogimos el coche y pusimos rumbo al Estany D’Engolasters, dejamos el coche en el aparcamiento de “Les Fonts” y empezamos a distribuir material en las mochilas, que no era moco de pavo.
DÍA 1
Eran poco más de las 3 de la tarde cuando comenzamos nuestra aventura por un entretenido sendero muy bien acondicionado y que iba picando hacia arriba en el que salvo el calor que hacía a esas imprudentes horas, no tenía ninguna dificultad, y en apenas 1 hora había llegado al Coll Jovell, que nos ofrecía una impresionante visión del valle del Riu Madriu, al cual descenderíamos hasta alcanzar el núcleo de Bordas de Ràmio. Una vez allí nos toca cruzar el Riu Madriu y afrontar la parte complicada de la jornada, un duro ascenso de 600m+ en apenas 3km por el Bosc del Ròdol, paralelo al Riu de Claror I Perafita pero varios metros por encima de él, para salir a un falso llano que nos dejaría en el Refugi de Perafita, un cuidado y cómodo refugio libre, en el cuál íbamos a pasar la noche. |
Valle del Riu Madriu desde Coll Jovell |
 |
Bajando a Ràmio
|
 |
Ràmio
|
 |
Saliendo del Bosc del Ròdol |
 |
Valle del Riu de Claror I Perafita |
Dejamos las mochilas en el refugio, a excepción de las cañas de pescar y nos alargamos al cercano Estany de la Nou a probar suerte como pescadores e intentar cenar pescado fresco, por suerte Francesc tiene un buen manejo de la caña y consigue sacar una hermosa trucha que junto con un par de ceps que habíamos cogido en el bosque combinaron de pistón para la cena y nos hicieron ir a dormir con muy buen sabor de boca.
 |
Francesc y la cena |
 |
Estany de la Nou
|
 |
La cocina |
 |
De sobremesa |
Datos etapa
Distancia – 7.7km
Ascenso – 977m
Descenso – 416m
DÍA 2
Tras un buen desayuno y dejar el refugio limpio a las 9 de la mañana comenzamos a caminar con la intención de ir a pasar la noche al Refugio de Montmalús, pero antes de eso nos quedan por delante bastantes entanys por visitar y tirar la caña.
Empezamos la jornada subiendo a los Estanys de Perafita, a los que llegamos rápidamente y tras probar fortuna con la caña y perder la paciencia decidimos seguir con la marcha. E aquí cuando se nos despierta el espíritu explorador y por no perder altura desde el Estany de Perafita, seguir el camino y subir al la Collada de la Maiana, decidimos mantener la altura y liarnos por un terreno algo confuso, dando con una cabaña ¿abandonada? sin acceso claro por ningún lado, que dejamos atrás en nuestra intención de alcanzar la Collada de la Maiana.
 |
Llegamos a unos de los Estanys de Perafita |
 |
En el Estany de Perafita más alto |
 |
Precioso el lago
|
 |
En la cabaña
|
Tras llegar a la collada, decidimos ir a probar suerte de nuevo con la caña al Estany de Serra Mitjana, por lo que nuevamente debemos de salirnos del camino al rato de comenzar la bajada, tras jabalinear un poco y avanzar lentamente entre rocas, pinos y rododendros, llegamos al Estany, un hermoso lago de aguas cristalinas en el que vemos que hay bastantes truchas, probamos suerte y tras probar unas cuantas veces conseguimos sacar un par de ellas que nos cocinamos a orillas del lago acompañadas de jamón.
 |
Menudas trazas... |
 |
Estany de Serra Mitjana |
Bien comidos reanudamos la marcha en busca del Riu Madriu, al cual llegamos en los Planes de L’Estall Serror, y siguiendo su curso por el GR-11, vamos ganando altura, dejamos el rio atrás, pasamos por el Estany de la Bova y posteriormente llegamos a un refugio en obras el cual a día de hoy se ha convertido en uno de los refugios con más comodidades del Pirineo, el Refugi de L’Illa, a los pies de la presa del Estany de L’Illa.
 |
Riu Madriu
|
 |
Torero! |
 |
Estany de la Bova |
 |
Caballos pastando |
 |
Selfie en la presa de L'Illa |
Son poco más de las 8 de la tarde cuando dejamos atrás el Refugi de L’Illa para ir en busca del Refugi de Montamús, algo nos hace suponer que se nos echará la noche por el camino, así que nos entretenemos poco, alcanzamos el Coll de L’Illa, y durante un breve tramo cruzamos la frontera a España, al valle del Riu de Vallcivera, dónde la noche nos cae encima y tenemos que sacar los frontales. Tras un pasar algún que otro apuro en la noche conseguimos llegar al Refugi de Montmalús, de nuevo refugio libre en perfectas condiciones, donde cenamos algo rápido y aprovechamos para ver las lágrimas de San Lorenzo antes de irnos a dormir.
 |
Coll de L'Illa, ya empezaba a escasear la luz... |
Datos etapa
Distancia – 16.7km
Ascenso – 1333m
Descenso – 1101m
DÍA 3
Después de una reparadora noche, Francesc aprovecha para pescar algo de comer ya que sobre el papel la etapa es corta y sin apenas desnivel, así que pasamos la mañana en las inmediaciones del refugio y tras una copiosa comida con su respectiva siesta, empezamos la marcha cerca de las 4 de la tarde, añadiendo la variante de volver al Estany de L’Illa por el Collet de Ribus, en vez de por el Coll de L’Illa, la jugada nos sale bien y llegamos sin contratiempos al Estany de L’Illa, dejándolo atrás y pasando junto los Estanys Forcats, por unos parajes bellísimos para acabar la jornada a orillas del Estany Blau, un solitario lago al que debemos bajar varios metros para alcanzar sus orillas y poder plantar la tienda.
 |
Refugio de Montmalús en la orilla del Estany |
 |
Más pescado fresco para comer! |
 |
Toca un baño...
|
 |
Luego les dejamos la playa a los caballos |
 |
Dejamos atrás el Estany de Montmalús
|
 |
Llegando al Estany d L'Illa |
 |
Estanys Forcats
|
 |
Ya casí estamos en el Estany Blau |
Tras una copiosa cena nos vamos a dormir y en mitad de la noche oímos un animal junto a nuestra tienda relamiéndose los restos de nuestra cena, no sabemos que animal era, pero en aquel momento el sueño, perrería, miedo… nos hicieron ignorarlo y seguir durmiendo. Quién sabe de que animal se trataría, lo que si que sabemos es que a la mañana siguiente el pan había desaparecedio junto con una cuña de queso…
Datos etapa
Distancia – 9km
Ascenso – 535m
Descenso – 506m
DÍA 4
Quizás esta es la etapa menos relevante y más triste de la travesía, por ser la última y porque el tiempo no acompaño en ningún momento, comenzando el día nublado y acabando lloviendo.
Como si de un ritual se tratara Francesc madrugó, se armó con su caña se fue a la orilla del lago a pescar, cuando salí de la tienda ya tenía el cupo de truchas, las limpió y las guardó cuidadosamente en la mochila como si de un tesoro se tratara. Recogimos el campamento y remontamos 150m hasta un pequeño collado cercano al Pic Dels Agols y comenzamos el descenso, sin entretenernos hasta que cerca del Refugi dels Agols se nos puso a llover, viendo que la cosa iba a más hicimos algo de tiempo en el refugio y cuando aflojó seguimos con la marcha hasta llegar al Camí de L’Óssa, el cual seguimos durante alrededor de 4km para llegar al Estany D’Engolasters, de donde habíamos partido hacía ya 4 días.
 |
Dejamos atrás el Estany Blau |
 |
Última bajada del día |
 |
De nuevo en la "civilización"
|
De esta forma dimos por finalizada una espectacular travesía por la Andorra desconocida y menos transitada, y lo de menos transitada está más que justificado, ya que en los 4 día que estuvimos de travesía solamente nos encontramos con unas 20 personas, en su mayoría en el Refugi de L’Illa.
Datos etapa
Distancia – 9.3km
Ascenso – 352m
Descenso – 1155m
Espero que, con la excusa de volver a vernos, podamos cuadrar algún día y poder escaparnos de nuevo mano a mano para que me siga enseñando los rincones que esconde el pequeño país de las montañas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario